LAS LEVAS DEL CAPITÁN NEGRETE
Va de pícaros. En el invierno de 1636, empezada la guerra con Francia, llevaron a la Cárcel de Corte -bien sujeto con grillos y una cadena- a un capitán llamado Negrete. Al parecer falsificó las patentes del Rey y reclutó compañías por su cuenta y a la buena de Dios. No contento con esta travesura, disponía de los alojamientos de los bisoños, repartía las correspondientes papeletas y, era cosa obligada, departía con alcaldes y regidores. Hasta nombraba oficiales. Estos disparates los perpetró en La Rioja aunque no llego yo a saber si por dinero o por figurar. Tan poderosa es una razón como otra y tan mala consejera la codicia como la vanidad.
Calculo yo que sería por ambas razones. A la codicia es posible que después se le uniera la vanidad ya que la mayoría de las veces van unidas.
ResponderEliminarSaludos
Mi impresión es que ganaba algún dinero con tales agencias. Las posibilidades eran muchas para un sinvergüenza como, probablemente, era Negrete.
EliminarSaludos cordiales.
Habrá que volver a reconsiderar esos métodos tan expeditivos dada la proliferación de pícaros y tunantes de todo género y condición en esta España de nuestros pecados.
ResponderEliminarUn saludo.
España nuestra de caballeros, santos y pícaros.
EliminarSaludos cordiales, don Cayetano
Pues no sé yo qué razones le moverían, pero no cabe duda que debió ser hombre con don de gentes y muy persuasivo. Todo un personaje de la picaresca, vaya, hasta que le pillaron.
ResponderEliminarUn saludo.
Y todo esto en unas circunstancias muy complicadas, nada lejos de la frontera francesa.
EliminarUn cordial saludo, señor DLT