EL INSOMNIO DE JOVELLANOS
"Cena y a la cama, en espera de un buen día; pero antes de mucho tiempo, y casi al de llenar la luna, empiezo a sentir el viento, que por instantes crece. El chocolate me había desvelado y hizo la noche más triste. Me duermo, al fin." Amaneció con mal tiempo y escribió: "esto nos desalienta".
(17-18 de noviembre de 1793, carretera de Pajares, recogido en sus Diarios, edición de José Miguel Caso González, 1992).
Para el Señor Jovellanos, el Santo Rosario por la noche y a dormir en la paz, una auténtica medicina. Saludos.
ResponderEliminarEra Jovellanos ilustrado y sincero católico. Algo muy del XVIII español.
EliminarSaludos y muchas gracias, Anónimo.